jueves, 21 de mayo de 2009

Te extraño

Te recuerdo...

Te extraño, extraño tu mirada tierna y seductora, extraño tus ojos, extraño tus caricias, extraño tus manos y mis manos tocando tu piel, extraño tus besos de esos labios tan hermosos, extraño tus abrazos que me transmiten mucha confianza, extraño tu calor de mujer, extraño que me hables mirándome a los ojos porque en ellos se refleja todo el amor de tu corazón, extraño tu voz tan suave, extraño que me hables al odio, extraño que me digas lo mucho que me amas, extraño tu piel tan frágil y suave, extraño tu sonrisa de alegría y tus gestos de tristeza, extraño tu aroma único impregnado en tu piel, extraño tus manías que sueles tener, extraño tus tiernos gemidos cuando estamos en la cama, extraño tus palabras llenas de amor y sinceridad, extraño estar a tu lado, extraño compartir muchos momentos que nos toca por vivir, extraño tocar tu mano y llevarte a recorrer caminos de algún lugar desconocido donde solo estemos tu y yo y nuestro amor, extraño decirte cuanto nos falta por vivir y lo mucho que nos falta por hacer, extraño darte besos y muchos abrazos, extraño hacerte reír, extraño decirte cuanto te amo, y lo mucho que te hecho de menos, extraño, extraño acariciarte y pasar mi mano por tu rostro, te extraño en el día como en la noche, te extraño y te recuerdo…

miércoles, 13 de mayo de 2009

Cuando volverás...

Por las noches te estaré esperando…

Hoy te estuve esperando como todas las noches, que aparecieras por algún lugar de esta habitación, que aparecieras como aquella vez que te vi, radiante como un destello de luz que alumbro la oscuridad de aquel entonces y de todas las noches en las cuales aparecías tú, fiel confidente, teníamos tanto por hablar, por conversar, por contar historias sin fin, cuentos de hadas, ninfas y elfos, donde me llevabas a un lugar mágico donde tú solo me acompañabas, agarrados de la mano, atravesando el muro infranqueable de los sueños, descendíamos por desiertos y lamentos, te acuerdas de esa vez que me abrigaste del frió de aquella noche invernal que congelaba hasta los huesos, me abrigaste tú tierna y dulce, con tu mirada lánguida te sumergías en el interior de este pobre corazón ya casi sin latidos, ya casi sin sentido, las horas del reloj que parecía que pasaban lentamente cada momento que estaba a tu lado era eterno e inolvidable, tú me viste caer una y otra ves , tu me viste derramar lagrimas de amor y desamor que se deslizaban por mis mejillas como gotas de un roció.

Cuando volverás otra vez a visitarme como todas las noches, para cobijarme en tu regazo y perderme por un instante de esta realidad tan agobiante, los días, las noches son tétricas, lúgubres sino te tengo aquí a mi lado, ya han pasado muchos abriles desde tu partida, sin darme una explicación te has marchado, dame alguna señal para saber cuando volverás de ese viaje ya casi sin retorno, el cual lo puedo percibir a través de mis sentidos, dime si pronto retornaras por la noches a mi lado, te has marchado sin decir ninguna palabra, ningún adiós y aun te sigo esperando…

Te esperaré como cada noche, con la mirada tierna, con el corazón abierto y con alguna historia nueva que contarte, te esperare bajo la oscuridad de esta noche y bajo la luna menguante, te esperare en algún rincón de esta habitación como todas los noches… estaré esperando tu llegada para quedarme inmutado otra vez ante tu mirada tierna y lánguida… no lo olvides…